San Cayetano de Thiene, presbítero, que, en Nápoles, en la región de la Campania, en Italia, se entregó piadosamente a obras de caridad, especialmente a favor de los aquejados de enfermedades incurables, promovió cofradías para formar religiosamente a los laicos e instituyó los Clérigos Regulares, para la reforma de la Iglesia, enseñando a sus discípulos a seguir la primitiva manera de vida apostólica († 1547).
Otros santos del día:
• Santos Sixto II, papa, y compañeros, mártires. El papa san Sixto, mientras celebraba los divinos misterios y enseñaba a los fieles los mandatos del Señor, al irrumpir los soldados para aplicar el edicto del emperador Valeriano fue detenido e, inmediatamente, decapitado el día seis de agosto. Con él sufrieron el martirio cuatro diáconos, que fueron enterrados con el papa en el cementerio de Calixto, en la vía Apia, y en ese mismo día, también sus diáconos santos Agapito y Felicísimo murieron en el cementerio de Pretextato, en donde fueron sepultados († 258).
• En Augsburgo, de la Retia, actualmente en Alemania, santa Afra, mártir. Siendo pecadora, se convirtió a Cristo y, sin haber sido aún bautizada, según cuenta la tradición, fue quemada viva por confesar a Cristo († 304).
• En Arezzo, de la Toscana, región de Italia, san Donato, segundo obispo de esta sede. La virtud y eficacia de sus oraciones son alabadas por el papa san Gregorio I Magno († s. IV).
• En Châlons, en la Galia Bélgica, hoy en Francia, san Donaciano, obispo († s. IV).
• En Rouen, también en la Galia, hoy en Francia, san Victricio, obispo. Fue soldado en tiempo del emperador Juliano y, al rechazar las insignias militares por amor a Cristo, padeció diversas torturas por orden del tribuno, que le condenó a muerte, pero, no obstante, habiendo alcanzado la libertad, y tras ser consagrado obispo, llevó también a la fe en Cristo a los feroces pueblos de los morinos y de los nervios, en la Galia del norte († hacia el año 410)
• En Besançon, en la Borgoña, también en Francia, san Donato, obispo, que compuso una Regla para vírgenes, siguiendo los preceptos de san Benito, san Columbano y san Cesáreo († después del año 658).
• En Venecia, hoy en Italia, beato Jordán Forzaté, abad, fundador de monasterios en Padua. No habiendo podido evitar la ruina de su patria a pesar de todos sus esfuerzos, padeció el destierro, que vivió piadosísimamente. Insigne por su modestia, probidad de costumbres y ciencia, se durmió devotamente en el Señor († hacia el año 1248).
• En Mesina, en Sicilia, región de Italia también, san Alberto degli Abbati, presbítero de la Orden de los Carmelitas, que convirtió a muchos judíos a la fe en Cristo y proveyó de víveres a su ciudad sitiada († hacia el año 1306/1307)
• En Sassoferrato, en el Piceno, hoy en las Marcas, en Italia, beato Alberto, monje de la Orden Camaldulense, insigne por la austeridad de vida y la perfecta observancia de su Regla († 1350).
• En L’Aquila, en la región Vestina (hoy Abbruzo), también en la actual Italia, beato Vicente, religioso de la Orden de los Hermanos Menores, célebre por su humildad y su espíritu profético († 1504).
• En la ciudad de Gondar, en Etiopía, beatos Agatángelo de Vincennes (Francisco) Nourry y Casiano de Nantes (Gonzalo) Vaz López Netto, presbíteros de la Orden de los Hermanos Menores Capuchinos y mártires, que en Siria, Egipto y Etiopía buscaron reconciliar con la Iglesia católica a los cristianos separados y, por orden del rey de Etiopía, fueron colgados en troncos con su cordón religioso y lapidados hasta la muerte († 1638).
• En Lancaster, en Inglaterra, beatos Martín de San Félix (Juan) Woodcock, de la Orden de los Hermanos Menores, Eduardo Bamber y Tomás Whitaker, presbíteros y mártires. Por ser sacerdotes y haber entrado en los dominios de rey Carlos I, fueron ahorcados († 1646).
• En York, también en Inglaterra, beato Nicolás Postgate, presbítero y mártir, que en el reinado de Carlos II, a causa de su ministerio sacerdotal, que había ejercido ocultamente entre los pobres durante casi cincuenta años, fue colgado en el patíbulo († 1679).
• En la localidad de Gorka Duchovna, cerca de Posnam, en Polonia, beato Edmundo Bojanowski, presbítero, que, conforme a los preceptos del Evangelio, trabajó con sumo ahínco en la formación de los pobres y gente analfabeta, y fundó la Congregación de las Esclavas de la Inmaculada Concepción de la Madre de Dios († 1871).
• En Colima, en México, san Miguel de la Mora, presbítero y mártir, que, en el furor de la persecución contra la Iglesia, fue coronado con el martirio por el hecho de ser sacerdote († 1927).
• En Los Yébenes, cerca de Toledo, en España, beatos Teodosio Rafel (Diodoro) López Hernando, Carlos Jorge (Dalmacio) Bellota Pérez y Eustaquio Luis (Luis) Villanueva Montoya, religiosos de la Congregación de los Hermanos de las Escuelas Cristianas y mártires, que, durante la persecución contra la Iglesia, recibieron de los hombres la muerte, pero de Dios la vida eterna († 1936).
(Del Martirologio Romano)