Solemnidad de la Anunciación del Señor, cuando, en la ciudad de Nazaret, el ángel del Señor anunció a María: “Concebirás y darás a luz un hijo, y se llamará Hijo del Altísimo”. María contestó: “He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra”. Y así, llegada la plenitud de los tiempos, el que era antes de los siglos el Unigénito Hijo de Dios, por nosotros los hombres y por nuestra salvación, se encarnó por obra del Espíritu Santo en María, la Virgen, y se hizo hombre.
Otros santos del día:
• San Dionisio, obispo de Corinto, en Grecia, durante el reinado del emperador Marco Aurelio. Es considerado uno de los más distinguidos pastores de la Iglesia del siglo II. Dotado de admirable conocimiento de la palabra de Dios, no sólo enseñó con la predicación a los fieles de su ciudad y de su provincia, sino también a los obispos de otras ciudades y provincias mediante sus cartas. Exhortaba a menudo a los creyentes a practicar la caridad y la solidaridad con las comunidades cristianas que tenían mayores necesidades. Dedicó su vida a descubrir y desvelar a sus fieles las raíces filosóficas paganas que dieron origen a las herejías de los primeros siglos de la Iglesia. La tradición griega asegura que murió martirizado el año 178, aunque es probable que muriera de muerte natural.
• Conmemoración de san Agabo, profeta, que, según atestiguan los Hechos de los Apóstoles, movido por el Espíritu Santo anunció una gran hambre sobre toda la tierra, así como las dificultades que Pablo habría de soportar de los gentiles († s. I).
• Conmemoración de los santos Herodión, Asíncrito y Flegón, a los que el apóstol san Pablo saluda en la Carta a los romanos († s. I).
• En Antioquía, en Siria, hoy Antakya, en Turquía, santos Timoteo, Diógenes, Macario y Máximo, mártires.
• En Alejandría, en Egipto, san Dionisio, obispo, varón de gran erudición, preclaro por su confesión de la fe y por la diversidad de sufrimientos y tormentos, descansando como confesor de la fe, ya anciano, en tiempo de los emperadores Valeriano y Galieno († hacia el año 265).
• En Como, de la Liguria, hoy Lombardía, región de Italia, san Amancio, obispo, que fue el tercero en la cátedra de esta Iglesia y fundó la basílica de los Apóstoles († 449).
• En Orvieto, de la Toscana, en Italia, beato Clemente de Auximo, presbítero de la Orden de Ermitaños de San Agustín, que dirigió y promovió la Orden con gran eficacia y adaptó sabiamente sus leyes († 1291).
• En Alcalá de Henares, en España, beato Julián de San Agustín, religioso de la Orden de Hermanos Menores Descalzos, que fue tomado por loco a causa de su exagerada penitencia y varias veces rechazado de la vida religiosa, predicando a Cristo más con el ejemplo que con palabras († 1606).
• En Namur, junto al Mosa, en Brabante, en la actual Bélgica, santa Julia Billiart, virgen, que, para asegurar la educación de las jóvenes, fundó el Instituto de Santa María y propagó la devoción al Sagrado Corazón de Jesús († 1816).
• En Alassio, cerca de Albenga, de la Liguria, en Italia, beato Augusto Czartoryski, presbítero de la Sociedad Salesiana, cuya salud enfermiza no le impidió caminar según la llamada de Dios, mostrando eximios ejemplos de santidad († 1893).
• En el convento de Belmonte, cerca de Cuenca, en España, beato Domingo del Santísimo Sacramento Iturrate, presbítero de la Orden de la Santísima Trinidad, que trabajó con todas sus fuerzas en la salvación de las almas y en fomentar la glorificación de la Trinidad († 1927).
(Del Martirologio Romano)