En Londres, en Inglaterra, santa Margarita Ward, mártir. Estaba casada y durante el reinado de Isabel I fue condenada a muerte por haber ayudado a un sacerdote, siendo ahorcada en Tyburn, donde acogió el martirio de buen grado. Allí mismo, con ella consumaron su martirio los beatos mártires Ricardo Leigh, presbítero, y los laicos Eduardo Shelley y Ricardo Martín, ingleses; Juan Roche, irlandés, y Ricardo Lloyd, del país de Gales, el primero, por el hecho de ser sacerdote, y los otros, por haber acogido a sacerdotes († 1588).
Otros santos del día:
• En Roma, en el cementerio de Comodila, en la vía Ostiense, santos mártires Félix y Adaucto, que habiendo confesado juntos a Cristo por una fe inquebrantable, juntos volaron vencedores al cielo († hacia el año 304).
• Conmemoración de sesenta santos mártires, que en Colonia Sufetana, en Africa Bizacena, actualmente en Túnez, por haber destruido una estatua de Mercurio, murieron a manos de los enfurecidos gentiles († 399).
• En Roma, conmemoración de san Pammaquio, senador, notable por su preparación en lo relativo a la fe y por su generosidad hacia los pobres. Por su piedad para con Dios fue fundada una iglesia en el monte Celio († 410).
• En el monasterio de Rébais, en el territorio de Meaux, en Neustria, actualmente en Francia, san Agilo, primer abad († hacia el año 650).
• En Breuil, también en el territorio de Meaux, san Fiacrio, eremita, que, oriundo de Irlanda, llevó una vida solitaria († hacia el año 670).
• En Tesalónica, en Macedonia, actualmente en Grecia, san Fantino, apellidado el Joven, eremita, que se consumó por Cristo con vigilias y trabajos († s. X).
• En Lucedio, en el Piamonte, región de Italia, san Bononio, abad, que llevó una vida eremítica, primero en Egipto y después en el monte Sinaí († 1026).
• En Trevi, en el Lacio, también región de Italia, san Pedro, que, a pesar de ser analfabeto, practicó en la soledad la sabiduría evangélica († hacia el año 1050).
• En Saluzzo, en el Piamonte, región de Italia, beato Juan Juvenal Ancina, obispo, que, habiendo sido antes médico, fue uno de los primeros en entrar en el oratorio de san Felipe Neri († 1604).
• En Zaragoza, en España, beata María Ráfols, virgen, que fundó la Congregación de las Hermanas de la Caridad de Santa Ana junto con el hospital de esta ciudad, el cual dirigió con fortaleza de ánimo entre muchas dificultades († 1853).
• En Almería, también en España, muerte de los beatos mártires Diego Ventaja Milán, obispo de Almería, y Manuel Medina Olmos, obispo de Guadix, que, encarcelados por odio al nombre cristiano, soportaron con paciencia los insultos y vejaciones hasta recibir de noche una muerte cruel († 1936).
• En el camino entre Puebla Tornesa y Villafamés, cerca de Castellón, igualmente en España, beato Joaquín de Albicácer (José) Ferrer Adell, presbítero de la orden de los Hermanos Menores Capuchinos y mártir, que a través del martirio consiguió el premio prometido a los que perseveran († 1936).
• En Bilbao, también en España, beato Vicente Gabanes Badenas, presbítero de los Terciarios Capuchinos de la Bienaventurada Virgen de los Dolores y mártir, que, durante la misma persecución contra la fe, mereció entrar en el banquete de la gloria († 1936).
• En Madrid, también en España, beatos mártires Antonio María de Arriaga Anduíza, religioso de la Orden de San Agustín, y Nicolás Romo Rubio, religioso de la Orden de Predicadores, que en la misma persecución fueron asesinados por odio a la fe cristiana († 1936).
• En Aravaca, en Madrid, también en España, beatos Germán Martín Martín, presbítero, y Dionisio Ullivarri Barajuán, religioso, ambos de la Sociedad Salesiana y mártires, que, durante la persecución contra la fe, derramaron su sangre por Cristo y alcanzaron la palma del martirio († 1936).
• En Kfiffan, en el Líbano, beato Esteban Nehmé (José), religioso de la Orden Maronita Libanesa († 1938).
• En Belo Horzonte, en Brasil, beato Eustaquio van Lieshout, presbítero de la Congregación de los Sagrados Corazones de Jesús y María († 1943).
• En Venegone, cerca de Varese, en Italia, beato Alfredo Ildefonso Schuster, obispo, que, siendo abad de San Pablo de Roma, fue elevado a la sede episcopal de Milán, donde, con gran cuidado y diligencia, desempeñó con admirable sabiduría su función de pastor por el bien de su pueblo († 1954).
(Del Martirologio Romano)