No hemos sido colocados en la sociedad de la que formamos parte para vivir aislados. Ni para que gire todo en torno nuestro. El cristiano está llamado a formar comunidad con los que le rodean. Sin sentirnos nunca superiores a los otros. Estamos destinados a formar la familia humana en la que debemos aportar cuanto somos para el bien común. Para que el Dios Uno y Trino sea la fuerza que nos lleve a conseguir que el mensaje del Evangelio llegue a todos.
![La perfecta alegría no puede existir sino en la perfecta entrega de sí mismo a Dios y a los Hombres – San Luis Orione La perfecta alegría no puede existir sino en la perfecta entrega de sí mismo a Dios y a los Hombres – San Luis Orione](https://live.staticflickr.com/65535/48383646507_009feb9157_o.png)
Entregarnos del todo. Sin reservarnos nada para nosotros mismos. Entregarnos por completo a Dios y a los hermanos. Esto es lo que se nos pide